El presidente del Consorcio de Universidades del Estado y rector de la U. de Valparaíso, Aldo Valle, pidió al Gobierno que se traduzcan en hechos concretos los compromisos de dar un trato preferente a los recintos estatales.

En ese contexto, Valle llamó a que se incluya en la glosa presupuestaria de 2015 un programa especial para entregar más recursos a las universidades estatales, por medio de aportes basales.

“Queremos que esos recursos se transfieran a las universidades del Estado mediante contratos plurianuales, para que en un programa que se extienda al menos por unos diez años estas universidades puedan recuperar su lugar en la educación superior, en términos de matrícula”, explicó Valle.

Con respecto al asunto de la matrícula, Valle dijo que ésta “se ha visto reducida sostenidamente por las políticas públicas, terminando en un sistema que paradojalmente se ha instalado una educación privada obligatoria, para muchos jóvenes que no teniendo en las universidades del Estado la posibilidad de obtener una vacante, están impedidos de poder optar entre una vacante en una universidad del Estado o una en la oferta privada”.

“Chile es el único país que en los últimos 40 años ha promovido un sistema de educación privada obligatoria. Eso se debe terminar, y nuestra petición es que quede claro en esta Ley de Presupuesto que las universidades del estado tendrán efectivamente un trato distinto, una relación distinta”, especificó.

Por otra parte, consideró que la polémica con el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, sobre la gratuidad en la educación superior quedó zanjada, luego de que la presidenta Michelle Bachelet reafirmara que ésta será gratuita de manera universal.

En tanto, el rector de la U. de Valparaíso descartó la solicitud de la oposición, sobre conformar una comisión presidencial para reformular la reforma educacional, ya que afirmó que la gente está cansada de las comisiones.

“Los chilenos estamos cansados de comisiones de expertos o de comisiones asesoras presidenciales, transversales, o en las que se auto atribuyen una competencia técnica que deja fuera a las mayorías. De lo que se trata ahora es que tengamos otros métodos, tengamos otra forma de determinar las directrices y los contenidos de la política pública en educación superior y en el sistema escolar”, manifestó.