La versión sinfónica del famoso musical de Broadway, compuesta por el gran director estadounidense Leonard Bernstein, destacó nítidamente en el décimo concierto de la Temporada 2014 de la Orquesta Sinfónica de Chile, que contó con la dirección del talentoso alemán Alexander Mickelthwate (Frankfurth, 1970).

La música de este drama inspirado en la obra “Romeo y Julieta” de Shakespeare, llevado al cine como “Amor sin barreras”, formó parte del programa “América”, que incluyó además la melodía de los compositores Aaron Copland (estadounidense), Alberto Ginastera (argentino) y Heitor Villalobos (brasileño). En todas, director y músicos brindaron entrega, complementación y plenitud de sonido.

Sobresalió, sin embargo, la composición del afamado Leonard Berstein, con su obra magna, que llegó como “Danzas Sinfónicas”, con un total de 22 minutos y dividida en nueve cuadros, de gran ritmo y colorido, mezcla de jazz sinfónico y agitada y vivaz música latinoamericana.

“West Side Story” se estrenó en Broadway en 1957, marcando un cambio en la historia de los musicales norteamericanos al ser el primero en narrar una historia trágica en una comedia musical. El argumento relata la historia de una pareja de jóvenes, Tony y María, quienes se enamoran en un baile aunque pertenecen a pandillas rivales.

Ella es puertorriqueña (los Sharks) y él anglosajón (los Jets). En una funesta pelea fallece el mejor amigo de él y el hermano de ella, lo que provoca una oleada de venganza que termina con la vida del enamorado, Tony, y el regreso de María a Puerto Rico.

El repertorio incluyó también melodías escritas por otros grandes compositores del continente: “Bachianas Brasileras” N° 9 del compositor brasileño “Heitor Villa-Lobos”; “Variaciones Concertantes” del argentino Alberto Ginastera y “El Salón México” del norteamericano Aaron Copland.

Este último figuró al comienzo del programa, con su atractivo “El Salón México”, que compuso en referencia a un llamativo club nocturno que conoció durante su primera visita a México. En la pieza utilizó melodías mexicanas enriquecidas, sin que ello afectara la sencillez de esta música. La respuesta del público mexicano fue tan favorable que se ha convertido en una de sus obras más interpretadas.

Existen al menos tres arreglos de la pieza, además de la partitura orquestal. Copland adaptó la obra para la película musical “Fista Brava”, dirigida por Richard Thorpe para MGM. Leonard Bernstein creó arreglos para piano solo y para dos pianos, a cuatro manos muy poco después del estreno. Además, una transcripción para piano de esta vivaz obra, fue realizado por el director Arturo Toscanini, en 1942, cuando el Maestro condujo la música en un concierto de difusión de la NBC.

En representación de Brasil se escogió al gran músico Heitor Villa-Lobos, de quien se interpretó su “Bachiana Brasilera” N° 9, la última de una de las series de composiciones clásicas más famosas que se han escrito en Sudamérica. Con once minutos de duración, contiene un Preludio y una Fuga escritos en forma de Bachiana, el estilo y forma de componer de Johann Sebastian Bach. La ejecución de la Sinfónica destacó una forma más solemne de creación del representante brasileño, en que fue muy importante la labor del maestro Mickelwate.

En cuanto al autor argentino Alberto Ginastera, compuso las “Variaciones Concertantes” en 1953. Ígor Markévitch dirigió el estreno el 2 de junio de ese año, en Buenos Aires. La obra está escrita para dos flautas, flautín, oboe, dos clarinetes, fagot; dos cornos, trompeta, trombón; timbales; arpa; y el coro de cuerdas.

Ginastera expresó que las Variaciones tienen “un carácter subjetivo porque en lugar de emplear materiales folclóricos, el ambiente argentino se obtiene mediante el uso de melodías y ritmos originales cuya tensión expresiva tiene un acento argentino pronunciado”.

La obra, de 28 minutos de duración para orquesta de cámara, con ritmo lento, se dividió en 12 temas, en los que sobresalen solistas, dúos de cuerdas, bronces y maderas, lográndose aquel cometido a cabalidad por los intérpretes de la Sinfónica y la adecuada dirección del conductor germano.