Tras derrotar a Holanda en penales, la selección argentina, liderada por el opaco Lionel Messi, se instaló en la final de Maracaná frente a Alemania, que repite las finales de 1986 y 1990, ganadas por los albicelestes y los teutones respectivamente.

Para muchos es una sorpresa que este equipo argentino juegue la final, y al mismo tiempo surge la eterna comparación entre Maradona y Messi, al que dicen le falta un mundial para poder compararse realmente al “Pelusa”.