Impacto causó en la opinión pública el caso de un niño de 6 años quien debió ser internado en el recinto asistencial de Castro con desnutrición y evidencias de maltrato físico, en un caso que dejó en evidencia las complejidades del sistema judicial chileno para proteger la integridad de menores.

El caso salió a la luz luego que una tía del pequeño, Irene Gueico Gueico, hiciera llegar una carta hasta BioBioChile exponiendo el escabroso caso, que tiene como principales acusados a los padres del menor.

En la misiva, la mujer llama la atención del entorno del menor que -a su juicio- no alertó a las autoridades ni tomó cartas en el asunto pese a las evidencias de maltrato. En ese sentido, apuntó directamente tanto a Centro Comunitario de Salud Familiar de Rilán, como a la escuela Mirta Oyarzo Vera de Rilán.

“Incluso en su escuela no les extrañó que asistiera sólo cada 10 a 15 días, o que andaba encogido. ¿Cómo no se preocuparon por él? ¿Cómo nadie hizo nada?”, señala Irene Gueico.

Al respecto, desde el establecimiento emitieron una declaración pública donde se defienden de la acusación, asegurando que las versiones entregadas tanto por los medios de comunicación, como también en redes sociales, han provocado un “daño emocional y laborar irreparable” para la docente a cargo del menor.

En esa línea, se defendieron indicando que “realizamos todos los procedimientos necesarios, dando cuenta a las redes pertinentes (…) a través de un informe psicológico”.

Por último, aseguraron sentirse “tranquilos” ante el papel que jugaron en su momento en este caso, que aún se mantiene en la incertidumbre respecto a quién quedará encargado del menor, que permanece temporalmente bajo custodia del Sename.

Revisa la declaración pública a continuación.

Comunicado by BioBioChile