El padre del “Conejo de Jade”, el módulo de exploración lunar chino, confía en poder enviar a Marte una versión de su vehículo teledirigido, indicó la agencia oficial china.

“Espero que de aquí a que me jubile, el pueblo chino pueda iniciar la exploración de Marte”, declaró Jia Yang en una entrevista difundida en la noche del jueves por la agencia Xinhua.

“Espero que podamos enviar allí una versión mejorada del ‘Conejo de Jade’”, el módulo lunar del que supervisó la concepción, añadió.

Jia también contó su desesperación cuando el robot, posado a mediados de diciembre en el suelo lunar, cesó de comunicar con la Tierra unas semanas después.

El “Conejo de Jade” (“Yutu” en mandarín, un nombre que hace referencia a la mitología china) es un todoterreno de seis ruedas lleno de electrónica.

Tuvo un problema mecánico causado por el “entorno complicado en la superficie de la Luna”, había explicado a finales de enero la administración de Estado encargada del espacio.

Los científicos temieron que no hubiera sobrevivido a una de las frías noches lunares, que duran el equivalente a 14 días terrestres.

“Es como si fuera engullido por un monstruo, que su espíritu estuviera lúcido pero que no pudiera moverse”, explicó Jia Yang para describir sus emociones de la época.

Pero finalmente el contactó se restableció con el “Conejo de Jade” a mediados de febrero, para gran alivio de los medios de comunicación nacionales.

Las autoridades declararon que la misión era un “éxito total” pero que los problemas mecánicos del robot se iban acumulando. La últimas informaciones se remontan a mayo e indicaban que estaba cada vez más “debilitado”.

Pekín, que tiene un gran retraso tecnológico, considera a su programa espacial como un símbolo de la ascensión de China entre las potencias mundiales.

El alunizaje sin incidentes del “Conejo de Jade” -una hazaña que sólo Estados Unidos y la URSS habían realizado anteriormente, y que no se había repetido en más de 37 años- fue motivo de gran orgullo en China, donde la población se entusiasma por las proezas del robot.

El programa espacial chino prevé instalar una estación permanente en órbita antes de 2020 para, a plazo, enviar un hombre a la Luna.

Un alto responsable científico citado por los medios de comunicación oficiales indicó en 2012 que China preveía tomar muestras en Marte antes de 2030.