Cuatro presuntos militantes islamistas murieron el viernes en Egipto al estallarles una bomba que estaban preparando en una granja propiedad de un alto cargo de los Hermanos Musulmanes, informó la policía.

La explosión ocurrió en una granja avícola situada en una aldea de la provincia de Fayum, donde la policía halló 39 bombas, circuitos electrónicos y productos químicos utilizados en la fabricación de explosivos, según un comunicado del ministerio de Interior.

Dos de las víctimas pertenecían a la cofradía, mientras que el estado de los otros dos cuerpos impidió por el momento su identificación. Se desconoce si el dueño de la granja, Ahmed Arafa Abdel Qadir, un líder de la cofradía islamista, murió en la explosión.

El brazo político de la cofradía, el Partido de la Libertad y la Justicia, identificó a los muertos como “simpatizantes” y aseguró que la policía lanzó una bomba contra la granja.

En El Cairo, un adolescente de 15 años falleció también este viernes en enfrentamientos entre manifestantes islamistas y la policía, según una fuente policial. Los agentes detuvieron a tres personas.

El gobierno egipcio mantiene desde hace un año una encarnizada lucha contra los Hermanos Musulmanes, el movimiento del depuesto presidente Mohamed Mursi, al que acusa de conspirar contra el Estado.