El mexicano Álvaro Corcuera, ex director de la congregación ultraconservadora Legionarios de Cristo, falleció este lunes por un cáncer cerebral y tras presidir “los años más difíciles” de esa congregación, afectada por varias denuncias de pedofilia contra su fallecido fundador.

Corcuera Martínez del Río, de 56 años, “ha fallecido después de una larga lucha con el cáncer”, indicó el sitio web de Los Legionarios de Cristo.

En 2005, el sacerdote fue nombrado director de la poderosa congregación después de que el papa Benedicto XVI obligó a su fundador y líder Marcial Maciel a jubilarse tras años de acusaciones por abuso sexual de varios niños y adolescentes cuando eran legionarios.

Corcuera dirigió la congregación “los nueve años más difíciles de nuestra historia” hasta febrero de 2014, cuando renunció tras detectársele ese tumor, señaló su actual director, Eduardo Robles-Gil.

El papa Juan Pablo II enaltecía a Los Legionarios como modelos de virtud para la juventud antes de que se desvelaran las graves acusaciones contra Maciel, fallecido en 2008.

La congregación, presente en 22 países, cuenta con 900 sacerdotes, 945 seminaristas, unos 70.000 miembros laicos y gestiona 12 universidades.