Los separatistas del este de Ucrania continúan lanzando ataques, respaldados por Rusia, a pesar de la declaración unilateral de alto al fuego efectuada por Kiev, dijo este domingo el jefe de Estado ucraniano Peter Poroshenko al vicepresidente de Estados Unidos Joe Biden.

Poroshenko ordenó el viernes a sus fuerzas cesar los combates durante una semana como parte de un plan más amplio de paz destinado a poner fin al peor enfrentamiento este-oeste desde la guerra fría centrado en la antigua república de la ex Unión Soviética, dijo la Casa Blanca.

Sin embargo, en una llamada telefónica el domingo, Poroshenko informó a Biden que “los separatistas respaldados por Rusia continuaron atacando a las fuerzas ucranianas, incluso con el uso de artillería, tras la declaración de alto el fuego”, señaló la presidencia estadounidense en un comunicado.

Biden apoyó la actitud de las autoridades ucranianas de decretar un cese al fuego unilateral pero “afirmó que los líderes separatistas se negaron a asumir una actitud equivalente”, agregó el texto.

En una advertencia al Kremlin, Biden dijo que Washington estaba “trabajando estrechamente con sus socios en el G7 para preparar nuevas sanciones económicas contra Rusia si Moscú no actúa (…) para detener el flujo de armas y militantes a través de la frontera y utilizar su influencia para llamar públicamente a los separatistas a que depongan las armas”.

El contacto entre Poroshenko y Biden se produjo luego que el presidente ucraniano y su par ruso Vladimir Putin llamaran a la apertura de un diálogo y los líderes de la autoproclamada República de Donetsk reafirmaran que no reconocían el cese al fuego unilateral declarado por los militares ucranianos.

El jefe del Kremlin ha estado enviando señales confusas a Kiev, incluyendo la emisión de una sorpresiva orden, el sábado, de mantener “en alerta total de combate” a las fuerzas rusas desde el Volga hasta Siberia occidental.