La sección japonesa de la organización ecologista internacional Greenpeace ha comprado acciones de Tepco, la compañía que explota la central nuclear accidentada de Fukushima, para participar en su asamblea de accionistas el próximo jueves.

“Militantes de Greenpeace van a pedir a Tepco (Tokyo Electric Power) que haga todos los esfuerzos para ayudar a las víctimas a limpiar el lugar”, escribió Greenpeace en un correo electrónico.

Los miembros y voluntarios de la organización prevén desplegar una pancarta para exigir que Tepco limite el vertido de agua contaminada de Fukushima Daiichi, en vez de centrarse en relanzar su central nuclear de Kashiwasaki Kariwa (noroeste).

“Vamos a pedir a los accionistas de Tepco que nos apoyen”, asegura la organización.

Greenpeace dice que ha comprado algunas acciones de Tepco, así como de la compañía occidental Kansai Electric Power y del diseñador de reactores Hitachi, para poder participar en la asamblea general de accionistas y opinar en las resoluciones propuestas.

“El fin de ser accionista es abogar por un mundo sin energía nuclear”, asegura Greenpeace.

La organización ecologista reacciona a todos los anuncios de Tepco y del gobierno sobre la energía nuclear en general y el accidente del 11 de marzo de 2011 en Fukushima en particular, que ha contaminado el entorno. Asimismo, critica la falta de medidas eficaces tanto por parte de las autoridades como de Tepco para indemnizar a las víctimas y limitar las consecuencias del desastre.

Greenpeace se opone también al proyecto del gobierno de Shinzo Abe de reanudar la explotación de los reactores nucleares que la autoridad competente del sector considere que son seguros sobre la base de unas normas más estrictas tras el accidente de Fukushima.