A solo días de que el Seremi de Transportes de la región de Valparaíso, Pablo Malig, anunciara su renuncia al cargo, se conoció que existe una disputa importante relacionada con el transporte de carga al archipiélago Juan Fernández, situación que llegó incluso a la presentación de un recurso de impugnación de la licitación.

Para entender el caso es necesario explicar que el transporte de carga al archipiélago está subsidiado por el Estado y que las empresas interesadas en realizar este servicio deben presentarse a una licitación.

En este sentido fueron dos firmas las que presentaron ofertas, Transmarco, con la motonave Antonio; y la naviera Iorana.

En el proceso de presentación de los antecedentes la empresa Iorana tuvo mayores puntajes de evaluación y, por ende, se adjudicó la licitación, sin embargo, fuentes al interior del gobierno regional confirmaron a La Radio que antes de la firma del contrato definitivo la Seremi de Transportes de la región de Valparaíso encabezada por Malig, determinó que había errores en la presentación de los documentos, entre ellos una boleta de garantía que había entregado la naviera.

Ante esta situación, habría recomendado al nivel central del Ministerio de Transportes adjudicar la licitación a la otra empresa, es decir Transmarko, quien estaba en segundo lugar. Todo a pesar de que ya se había emitido incluso el decreto ministerial de adjudicación del transporte subsidiado.

Las mismas fuentes confirmaron que Iorana contrató un abogado, el cual presentó un recurso legal en el Tribunal de Contrataciones para dilucidar definitivamente qué empresa debe adjudicarse la licitación, recurso que habría sido acogido e ingresado a trámite, lo que significa que el Ministerio de Transportes tiene 10 días de plazo para responder al cuestionamiento.

Consultado respecto al tema el alcalde de Juan Fernández, Felipe Paredes, dijo que hasta el momento no hay información oficial sobre el caso, no obstante le preocupa la situación porque podría interferir el transporte de carga al archipiélago y, finalmente, los únicos perjudicados serán los habitantes de la isla.

Paredes dijo que hasta el momento solo por información extraoficial, se ha conocido que los transportes de carga podrían realizarse por la modalidad de trato directo, lo que al menos por cinco meses podría asegurarse el viaje mensual al archipiélago.

Por otra parte y consultado respecto a la situación que se generó en el último viaje del Buque Aquiles, que no pudo transportar a más de 35 pasajeros hacia el continente, Paredes agradeció a la Armada por la disposición y destinar una barcaza desde Talcahuano, para que los afectados pudieran viajar.

De esta manera desde el municipio se dio por superado el impasse.