De celebración a incidentes. Por desgracia, la alegría del triunfo de Chile sobre Australia en el Mundial de Brasil pronto se convirtió en excusa para el vandalismo en Temuco, donde un grupo de jóvenes e incluso niños, comenzaron a destruir la infraestructura pública.

Los desórdenes se produjeron en la céntrica plaza Teodoro Schmidt, afectando principalmente a los faroles del recinto, así como una caseta de teléfonos junto a un paradero de taxis, los cuales fueron rotos por los manifestantes.

Esto obligó a la acción de un grupo de Fuerzas Especiales, que mediante un carro lanza aguas procedió a disolver al grupo.