El mundial ya se inició y con ello millones de personas siguieron atentos las transmisiones de la televisión y las radios en la inauguración que se llevó a cabo en el remozado estadio Arena Corinthians de Sao Paulo.

Fue un acto central que contó con la presencia de una decena de jefes de Estado y de Gobierno, los cuales participaron primero en un almuerzo organizado por la presidenta brasileña Dilma Rousseff en el hotel Marriott, ubicado en uno de los terminales aéreos de la ciudad.

Estuvieron presentes los mandatarios de Bolivia, Evo Morales; de Chile, Michele Bachelet; de Ecuador, Rafael Correa; de Paraguay, Horacio Cartes; de Uruguay, José Mujica; y de Surinam, Desire Delano Bouterse, por la región americana.

Además los presidentes de Angola, José Eduardo dos Santos; de Gabón, Ali Bongo; el vicepresidente de Ghana, Kwesi Bekoe Amissah-Arthur; el emir de Qatar, Hamad bin Khalifa al-Thani; y el primer ministro de Croacia, Zoran Milanovic.

También ahí el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y el presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), Joseph Blatter.

Justamente el mandamás de la FIFA es el que estuvo bajo el ojo de las críticas debido a las “enormes restricciones que generó dicha entidad privada” hacia las comitivas oficiales. Y esto se debe a que la organización del evento entregó solamente un invitación adicional a cada presidente que llegó a la inauguración Brasil.

Es por esta razón que en el caso chileno la ministra del Deporte Natalia Riffo tuvo que conformarse de ver por televisión desde Brasilia la apertura y el primer partido, ya que la entrada adicional Bachelet se la otorgó al canciller Heraldo Muñoz.

Muñoz además tuvo que transformarse en “fotógrafo” y sacarle instantáneas a la jefa de Estado, las cuales publicó en la red social twitter, debido a que tampoco el personal que asiste a la mandataria pudo ingresar.

Normas o reglas de la FIFA que han causado la molestia del gobierno de Dilma Rousseff, quien en días previos había señalado que “estaba cansada”.