El sistema frontal que afecta a Los Lagos ya suma miles de damnificados, situación que obligó por estos días a la presidenta Michelle Bachelet declarar zona de catástrofe en tres provincias de la región, entre ellas la provincia de Osorno, que tiene una de las comunas más afectadas: Río Negro.

En este contexto es que la ayuda para las familias damnificadas es fundamental, no sólo desde el punto de vista material sino que también apoyo en el ámbito de la salud, ya que los niños y adultos mayores son los que presentan mayores riesgos de contraer enfermedades a raíz de las precipitaciones y bajas temperaturas.

Es por esto que un grupo de médicos generales de zona asistieron en apoyo de las personas que requieren atención médica, considerando que muchos de los damnificados perdieron todos sus medicamentos producto de la entrada de las aguas a sus viviendas, que hasta ahora son inhabitables.

El presidente nacional de médicos generales de zona y coordinador de las actividades de salud en Río Negro, Nicolás Moya, explicó que un grupo de 14 médicos de toda la provincia de Osorno asistió en apoyo médico a la zona, y una de las primeras actividades que realizaron fue un puerta a puerta.

De igual modo, Moya indicó que en la primera actividad médica en terreno no sólo brindaron atención médica, sino que también apoyo psicológico.

La misión de los médicos generales de zona es ir en ayuda de los más vulnerables, en este caso le tocó asistir a las familias damnificadas de la comuna de Río Negro, así como también apoyar a los centros de salud de baja complejidad médica.

A nivel provincial los médicos generales de zona trabajan en centros de salud de baja complejidad, como la Misión de San Juan de la Costa, Puerto Octay, Río Negro, Entre Lagos, Bahía Mansa.