Las partes en conflicto en Siria deberían “parar el baño de sangre” y negociar, declaró este viernes el jefe del grupo armado Hezbolá, un aliado clave del presidente Bashar al Asad.

“Pedimos a los combatientes que busquen la reconciliación y el diálogo, que busquen salidas políticas para parar el baño de sangre” declaró Hasan Nasralá, en un mensaje televisado.

A juicio del jefe de Hezbolá, las elecciones “prueban que cualquier solución política en Siria empieza y termina con el presidente Bashar al Asad”, reelecto por aplastante mayoría.

“Es un presidente que fue elegido por millones de personas para un nuevo mandato de siete años y los que quieran negociar una solución política deben negociar con él”, insistió.

La elección de Asad, con un 88,7% de los votos, fue calificada de “farsa” por la oposición y las potencias occidentales.

La oposición siria sufre de “un sentimiento de fracaso y decepción. Esperaban un boicot popular pero se produjo lo contrario” declaró Nasralá.

“Todos deben reconocer que la guerra no les permitirá tomar el control de Siria”, añadió, en alusión a los rebeldes.