La selección de fútbol de Alemania, que se prepara para el Mundial de Brasil, está muy preocupada por la situación del centrocampista ofensivo Marco Reus, internado en un hospital de Maguncia para ser examinado de su tobillo izquierdo, que se lesionó el viernes durante el amistoso ante Armenia (6-1).

La lesión se produjo en el último minuto del primer tiempo, cuando Reus intentaba robar un balón y terminó lesionado de su tobillo izquierdo, abandonando el campo sin siquiera poder apoyar la pierna lastimada, tras un choque desafortunado con un rival. Fue reemplazado por Lukas Podolski.

“No sé aún lo que tiene, tenemos que esperar. Se pudo ver que su pie estaba hinchado, pero espero que no haya sido nada de ligamentos (la lesión)”, afirmó el técnico germano Joachim Low.

“Marco ha estado en muy buen nivel y una mala lesión sería duro”, comentó el capitán Lahm.

El jugador del Borussia Dortmund, de 25 años de edad, fue llevado a un hospital de Maguncia para que se le realicen exámenes médicos que, se espera, descarten una lesión grave que lo pueda dejar fuera de la Copa del Mundo, en una recta final maldita hacia la justa en Brasil, de la que ha quedado fuera otra estrella como el francés Franck Ribery, baja definitiva en los 23 de Francia.

El equipo germano, que el sábado viaja hacia Brasil, está muy inquieto y medrado por las lesiones. El capitán Philipp Lahm está afectado de un tobillo, su adjunto Bastian Schweinsteiger de un rodilla, mientras que el arquero Manuel Neuer todavía se repone de la lesión de un hombro sufrida el 17 de mayo en la final de la Copa de Alemania.

La “Mannschaft” integra el grupo D del Mundial, en el que enfrentará a Portugal el 16 de junio, y después a Ghana y Estados Unidos.