Cerca de treinta pasajeros que aguardaban zarpar en la embarcación Aquiles de la Armada, fueron dejados en la isla Robinson Crusoe, debido a la falta de espacio.

Personas con horas médicas, fijadas en el continente, casos impostergables, y otras que han hecho sentir rabia e indignación, fueron conocidas luego de que el Aquiles retornara al continente, dejando a ésta personas sin su lugar. Al parecer no habrían más viajes, hasta la segunda quincena de junio.

De acuerdo a lo que nos indicó una residente del archipiélago, que fue informada de la postergación de 34 cupos, el aumento de pasajeros se debió al programa de visitas por la reconstrucción, posterior del Tsunami de 2010.

La molestia y desesperación se centra en que las horas médicas y asuntos personales, fueron planeados con anticipación.

Sonia López, contó cómo ellos y el alcalde de Juan Fernández, le rogaron al jefe de la Primera Zonal Naval, contraalmirante Julio Leiva, que dejase subir a quienes estuvieron desde las 6 de la mañana, esperando embarcarse.

En la embarcación retornaron al continente, el intendente y los Seremis de Justicia, Transportes, Economía, y sus equipos.

Una solución rápida, pero que depende de las condiciones del tiempo, del viento y del eventual éxito que tengan las gestiones del alcalde de Juan Fernández, sería gestionar un avión para un vuelo extraordinario en las próximas horas.

Intentamos contactarnos con Comunicaciones de la Primera Zona Naval para dar cobertura a la reacción de la Armada, lo que no fue posible.

En el caso del joven que será operado de la columna, personas que se enteraron de que su madre se quedó en Juan Fernández, intentarán conocer su estado de salud, y si está o no siendo visitado en el hospital.