Luego que el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, saliera a criticar el anuncio del Gobierno de debatir sobre la despenalización del aborto, en casos específicos, además de los proyectos que son parte de la reforma educacional, parlamentarios de la Nueva Mayoría, afirmaron que las decisiones políticas, pasan por ellos.

Desde el Gobierno, el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, afirmó que cuando llegué el momento de debatir, se valorará la participación de todos los actores de la sociedad, además de los partidos políticos.

El diputado y vicepresidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahín, afirmó que la visión de la iglesia Católica es valorable, pero que cuando se trata de debatir las reformas propuestas por el Ejecutivo, éstas tienen que pasar por el Gobierno y el Congreso.

Misma posición es la que tiene el senador del Movimiento Amplio Social (MAS), Alejandro Navarro, quien indicó que la posición de la Iglesia Católica es conservadora por origen, por lo que señaló que es necesario también tener la opinión de la ciudadanía.

Tanto Chahín como Navarro descartaron que el cardenal Ezzati forme parte de la “oposición”, luego de las críticas que realizara el Partido Socialista, Osvaldo Andrade, a la posición adoptada por el arzobispo de Santiago.