Grandes expectativas tenía el gobierno Francés con su ambicioso plan de renovación de sus flotas de ferrocarriles regionales TER, sin embargo, algo falló en su estrategia y hoy enfrenta un gran revés.

La compañía estatal de trenes franceses (SNCF), encargó 2000 nuevos vagones a la compañías Alstom y Bombardier, para iniciar el plan de modernización que comenzó el 2009, sin embargo, más de 840 de éstos nuevos modelos son demasiados anchos para circular por casi 1300 de las estaciones más antiguas de Francia, informó el diario español El País.

La información fue lanzada por Le Canard Enchaîné, un satírico medio francés, pero fue confirmada por las empresas públicas responsables de la red ferroviaria (RFF) y de los ferrocarriles (SNCF).

El error en el proyecto, que costó a Francia 15.000 millones de euros (20 billones de dólares), está siendo investigado por el secretario de Estado de Transportes, Fréderic Cuvillier, sin embargo, los políticos de ese país continúan indignados por el tema. “Cuando se produce un error que cuesta tanto dinero hay que atenerse a las consecuencias”, señaló el primer secretario del Partido Socialista Francés, Jean-Christophe Cambadélis, deslizando la idea de pedir la dimisión de los directores de la SNCF y la RFF.

Pero no todo esta perdido, porque para poder solucionar el problema el gobierno de François Hollande debió aprobar un plan de urgencia por 50 millones de euros para poder ampliar y remodelar los andenes en cuestión.

Se espera que el nuevo servicio de trenes pueda entrar en servicio a partir de 2016.