Ni con el gobierno anterior ni con el actual, se encuentran satisfechos los pescadores artesanales de Arica, quienes vieron reducida su zona de pesca tras el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que formuló un nuevo límite marítimo entre Chile y Perú.

Sergio Guerrero, presidente del Sindicato de Pescadores Artesanales de Arica, reconoció que a cuatro meses del dictamen, los efectos negativos se perciben, sobre todo para quienes realizan la pesca de altura.

En esa zona, entre las 60 y 140 millas, se encuentran los recursos más importantes, como son la albacora, jurel, pargo y palometa. Sin embargo tras fijarse una diagonal entre la milla 80 a la 200, la ruta actual que deben tomar, es ir en dirección al sur, hasta Pisagua, límite con la región de Tarapacá.

“Antes avanzábamos en línea recta y en ocho horas estábamos en la zona de pesca. Ahora hay que navegar hacia el sur entre 16 y 18 horas”, explica Guerrero a La Tercera.

Por lo anterior, el dirigente es categórico: “Tras el fallo de La Haya se levantó harta polvareda, pero después nos dejaron a todos abandonados“.

Las palabras toman fuerza cuando recuerda las reuniones con el ex ministro de Economía, Féliz de Vicente, en Santiago, donde se les prometió ayuda y mitigación para sus jubilaciones, que era la demanda que más fuerte se escuchaba en los días del litigio.

“Lo de la acuicultura no es nuevo, porque se viene trabajando hace cuatro años, el convenio regional con Sernapesca ya lo teníamos. Lo del mall es para los comerciantes, no para los pescadores y si nos van a jubilar con 70 mil pesos mensuales, es lo mismo que si cada uno lo hiciera por su cuenta”, comenta.

Respecto a una reunión que sostuvo con el intendente actual de Arica y Parinacota, Emilio Rodríguez, y con titular de Economía, Luis Céspedes, Guerrero también es crítico. “Fue una reunión a nivel nacional (…). Se trató nuestro problema, pero poco”, afirma.