Ex prisioneros políticos presentaron querella por violencia sexual al interior de los centros de detención clandestinos de la dictadura. Se trata de una querella donde se denuncian torturas, pero específicamente ilícitos de connotación sexual, como delitos de lesa humanidad, sufridos por mujeres detenidas, tras el golpe militar de 1973.
Son cuatro querellantes, entre ellas Alejandra Holzapfel y Soledad Castillo, quienes relataron en el libelo los vejámenes que sufrieron en su paso por Villa Grimaldi.
Entre quienes acompañaron a las víctimas se encontraba Lucrecia Brito, quien estuvo detenida con la Presidenta de la República, Michelle Bachelet. La ex prisionera política relató que la ex mandataria estuvo aislada junto a su madre Angela Jeria, y pudo sortear los vejámenes sexuales.
La querella la interpuso el abogado Hiram Villagra en la Corte de Apelaciones de Santiago, para que sea investigada por el ministro en visita Mario Carroza. El jurista destacó lo inédito de la acción judicial.
La querella es contra los responsables de los centros de tortura de la época, el ex director de la DINA, Manuel Contreras, a cargo de Tejas Verdes, el coronel Marcelo Moren Brito, de Villa Grimaldi, y el general Raúl Iturriaga Neuman, que dirigía el recinto denominado “Venda Sexy”.
