Al menos diez personas murieron y cerca de 90 resultaron heridas el viernes en Kenia en un atentado con dos explosiones en un mercado cerca del centro de la capital, según las autoridades y fuentes médicas.

“Diez muertos y alrededor de 70 heridos en las dos explosiones [del mercado] de Gikomba”, anunció en su cuenta de Twitter el Centro keniano de gestión de catástrofes (NDOC). Otro hospital de la ciudad aseguraba haber recibido 14 heridos más.

El hospital Kenyatta de Nairobi había indicado previamente que habían llegado ocho cuerpos e ingresado más de 70 heridos, algunos de los cuales “sangraban mucho”, indicó a la AFP un portavoz del centro, Simon Ithae. “Necesitamos mucha sangre”, añadió.

Otros 14 heridos fueron ingresados en el hospital Guru Nanak, el más cercano al lugar de las explosiones. “Tres de ellos están en estado crítico, pero estable”, declaró a la AFP el director del hospital Ravi Kaul “la mayoría tiene fracturas en brazos y piernas”, añadió.

La Cruz Roja de Kenia estableció un punto de donación de sangre en el hospital Kenyatta.

Las dos explosiones se produjeron a la entrada del mercado Gikomba, situado a un centenar de metros del centro de la ciudad, cerca de unos puestos de ropa, según un fotógrafo de la AFP que vio dos cráteres a unos diez metros de distancia el uno del otro.

Ambas detonaciones fueron provocadas por bombas artesanales que habían sido “detonadas simultáneamente”, anunció a la prensa el jefe de la policía de Nairobi, Benson Kibue. La policía informó de que se había detenido a dos sospechosos.

“La primera en un matatu (minibús público) de 14 asientos, la segunda en un mercado de Gikomba”, anunció el NDOC en Twitter.

El minibús de transporte público estaba muy deteriorado por la explosión. Presentaba impactos solo en el lado izquierdo que parecían hechos por trozos de metal proyectados por la explosión, por lo que se podría suponer que la bomba fue detonada en el exterior.

Había trozos de madera y ropa esparcidos por todas partes. La fuerza de la explosión incluso proyectó varias prendas hasta el tendido eléctrico.

El ministro de Relacionas Exteriores británico William Hague ha querido condenar este nuevo atentado y dar su pésame a los familiares de las víctimas. “Las autoridades kenianas tienen nuestro apoyo total para investigar este incidente e intentar evitar más atentados”, señaló.

Kenia ha sufrido recientemente varios atentados con bomba, algunos de ellos contra autobuses. A principios de mayo se produjeron una serie de ataques que dejaron siete muertos y un centenar de heridos en Mombasa y Nairobi en un fin de semana.

Varios países occidentales elevaron su nivel de alerta sobre Kenia debido a las “amenazas terroristas” y desaconsejaron viajar a las zonas costeras del país.

Las dos agencias de viajes británicas más importantes comenzaron este jueves a repatriar a 400 turistas que se encontraban en la costa y anularon los vuelos a Mombasa, la principal ciudad turística costera, hasta el 31 de octubre.

Desde que Kenia envió a su ejército al sur de Somalia en octubre de 2011 para combatir a los insurgentes islamistas shebab ha sufrido numerosos atentados, siendo el más espeluznante de todos, reivindicado por los shebab, sigue siendo el que se produjo el pasado septiembre contra el centro comercial Westgate de Nairobi en el que murieron 67 personas.