Las autoridades de Serbia y Bosnia decretaron este jueves estado de alerta por las peores inundaciones registradas en la región en los últimos 120 años.

Tres personas se ahogaron en Serbia y unas 3.000 fueron evacuadas. Los ejércitos de ambos países fueron movilizados para socorrer a los damnificados. Serbia y Bosnia pidieron ayuda a la comunidad internacional.

“Es la peor catástrofe natural de la historia de Serbia”, declaró el primer ministro de este país, Aleksandar Vucic, mientras que se dirigía a las zonas inundadas.

Más de 3.300 personas fueron evacuadas en el oeste y en el suroeste del país, mientras que unas 200 esperan aún ser socorridas.

Las escuelas en Belgrado y en otras 18 ciudades del país permanecerán cerradas hasta finales de semana. Unos 100.000 hogares en Serbia y 50.00 en Bosnia no tienen luz, según fuentes oficiales.

Asimismo, se interrumpió la excavación de dos minas de carbón en Serbia debido a inundaciones en dos minas cerca de Belgrado, que suministran las centrales térmicas más importantes del país.

Se interrumpió también la circulación ferroviaria hacia Montenegro (suroeste) y Nis (sur) por las mismas razones.

En la vecina Bosnia, varias ciudades fueron inundadas por el desbordamiento del río Bosna. En Maglaj y Doboj (norte), miles de habitantes se encuentran bloqueados en sus hogares.

A principios de la noche, se podía acceder al centro de Maglaj únicamente en botes neumáticos. El ejército envió helicópteros para evacuar a varias decenas de personas en peligro, informó un fotógrafo.

En las últimas 48 horas, han caído entre 100 y 150 l/m2 de lluvias. Por lo general, las precipitaciones promedio en las zonas afectadas no superan los 80 l/m2 en todo el mes de mayo, indicó el meteorólogo Zeljko Majstorovic.