Efectivos del OS-7 de Carabineros de la Región de O´Higgins desbarataron una presunta organización de traficantes de drogas, que lideraba un boliviano nacionalizado chileno, la cual operaba en las comunas de Machalí y Rancagua.

El grupo era integrado además por dos chilenos y otros dos bolivianos, quienes contaban con un laboratorio clandestino donde cocinaban la droga y procedían a aumentarla para poder obtener mayores dividendos en el negocio ilícito.

Las indagaciones policiales se efectuaron en el marco de la “Operación Cocineros” y comenzaron en noviembre del año pasado, en conjunto con la Fiscalía Local de Rancagua. En ellas se sindicaba como el cabecilla a un boliviano de 22 años, quien, según los antecedentes, era el cocinero de la banda y reclutaba a compatriotas residentes en Santiago para enseñarles cómo abultar la droga.

En las pesquisas cayeron ciudadanos altiplánicos de 24 y 22 años, además de dos chilenos de 28 y 18 años.

Los policías allanaron tres inmuebles, incluida una parcela ubicada en el sector el Gindal en Machalí, donde estaba el laboratorio y los insumos utilizados para cocinar la pasta base de cocaína.

Las aprehensiones se efectuaron cuando la banda se preparaba para cocinar 884 gramos de pasta base, de los cuales pensaban obtener unos cuatro kilos de la droga. El alcaloide fue decomisado junto a nueve botellas contenedoras de ácido sulfúrico, una botella de soda cáustica, 400 mil pesos y un vehículo.

Todos los detenidos quedaron a disposición de la justicia imputados de infracción a Ley de Control de Drogas (20.000).