Una dirigente provincial del conservador Partido Popular que gobierna en España, Isabel Carrasco, murió tiroteada este lunes en León, norte de España, en un acto de “venganza personal” por el que fueron detenidas una madre y su hija, anunciaron las autoridades.

El ministerio del Interior señaló que el asesinato no estuvo motivado por razones políticas sino por una “venganza personal” contra Carrasco, presidenta de la diputación de León, el órgano de gobierno provincial.

“Parece ser que la hija fue despedida ayer (domingo) de la diputación de León donde trabajaba como ingeniera de obras. Por eso todo apunta a que es una venganza personal“, señaló un portavoz ministerial.

El asesinato se produjo sobre las 15H20 GMT en un puente peatonal en la zona universitaria de la ciudad.

“Ha fallecido. Le han pegado unos tiros y ha fallecido”, informó poco después a la AFP una portavoz local del Partido Popular.

El tiroteo fue avistado por un policía nacional retirado que se encontraba cerca del lugar del crimen y que “ha podido ayudar a la rápida identificación” de las presuntas culpables, dijo el portavoz de Interior.

Gracias a esta colaboración, la policía nacional pudo detener poco tiempo después a dos mujeres, madre e hija, que habían huido del lugar del crimen.

Las dos arrestadas son esposa e hija del inspector jefe de la policía nacional de la localidad vecina de Astorga.

“La policía está haciendo pruebas para saber quién ha sido el autor de los disparos”, añadió el portavoz ministerial, puntualizando que el arma homicida todavía no se había encontrado.

“Ahora mismo la investigación sigue abierta para resolver la situación lo antes posible”, dijo en una rueda de prensa televisada el delegado del gobierno en la región de Castilla y León, Ramiro Ruiz Medrano, que describió el asesinato como “un hecho dramático y sin ninguna explicación”.

Ruiz señaló también que hasta entonces no se había registrado ninguna denuncia por amenazas por parte de Carrasco, una relevante figura política en la región.

Su asesinato ha causado estupor en un país poco acostumbrado a los homicidios de políticos desde que la organización separatista vasca ETA anunciara el fin de la violencia en 2011.

“Consternado por el asesinato de Isabel Carrasco. Mi pesar y apoyo a su familia y compañeros. Es momento de estar unidos”, señaló en su cuenta de Twitter el jefe de gobierno español, Mariano Rajoy.

Precisamente, Carrasco iba a asistir por la noche a un mitin electoral del Partido Popular en Valladolid (centro de España), en el que iba a intervenir el propio Rajoy.

Nacida en la provincia de León en 1955, Carrasco había ocupado varios cargos en la administración de la región de Castilla y León y había sido senadora en las Cortes españolas entre 2003 y 2007.

“El Partido Popular expresa su más profundo pesar y anuncia que quedan suspendidos todos los actos programados para el día de hoy”, dijo la formación en un comunicado.

El principal partido de la oposición, el Partido Socalista Obrero Español, así como el resto de formaciones, enviaron sus condolencias al partido conservador y suspendieron también sus campañas electorales.