Cuando nos dicen que la risa es la mejor medicina contra el estrés, la rutina y los malos momentos parece que no están lejos de la verdad biológica. De acuerdo a un reciente estudio de la Universidad de Loma Linda, en California, Estados Unidos, el simple acto de reír reduciría el daño de una hormona en el cerebro.

Se trata del cortisol -más conocida como “hormona del estrés”- que entre los daños más comunes que causa se encuentra la desconexión de células del cerebro, ligada a la pérdida de memoria en personas adultas.

Los investigadores de la casa de estudios exhibieron un video de 20 minutos en donde se mostraban escenas humorísticas de distinto tipo a dos grupos de prueba. El primero de ellos se encontraba en perfectas condiciones de salud, mientras que el segundo conjunto de personas padecía diabetes. Un tercer grupo, en tanto, no fue expuesto al registro de los científicos estadounidenses.

El resultado del experimento indicó que los dos grupos que presenciaron el video vieron reducidos sus niveles de cortisol y las pruebas de memoria de las que fueron partícipe evidenciaron también buenas conclusiones.

De acuerdo a los señalado desde la revista Muy Interesante, nuestro sentido del humor disminuye el impacto que tienen las hormonas negativas sobre nuestras neuronas, que a su vez guardan relación con la capacidad de memorizar datos y prácticas habituales.

Lee Burk, uno de los expertos que estuvo a cargo del estudio, señaló que reír libera endorfinas y dopamina, proporcionando esa sensación placentera a nuestro cerebro. Los cambios neuroquímicos de esta envergadura funcionan de igual modo sobre nuestro sistema inmune, preparándolo de mayor forma ante eventuales enfermedades.