Andrew Garfield, quien se pone por segunda vez el traje de Spiderman en “El Sorprendente Hombre-Araña 2: La Amenaza de Electro”, da rienda suelta al humor y se entrega “en cuerpo y alma” a su personaje de “héroe corriente”.

Marc Webb, quien ya estuvo al mando de la primera entrega de la serie que será una trilogía, se encargó nuevamente de la dirección, mientras que Garfield y Emma Stone -que son pareja tanto en las pantallas como en la vida real- retoman sus papeles de ‘Peter Parker’ y ‘Gwen Stacy’.

La primera parte de la nueva trilogía del hombre araña, estrenada en 2012 tras el éxito de público y crítica que tuvo la trilogía anterior, de Sam Raimi con Tobey Maguire y Kirsten Dunst, se defendió bastante bien en las taquillas, con ingresos mundiales de 754 millones de dólares.

Esta segunda parte, con potentes escenas de acción muy al estilo de “Iron Man” y “Avengers” (del competidor estudio Disney), le dio a Andrew Garfield la oportunidad de “tomar posesión” de su personaje tras una primera entrega que, como todas las primeras partes, estaba destinada a sentar las bases narrativas de la saga.

Al mismo tiempo, el personaje de Peter Parker se apropia mejor de su “doble” heroico, el Hombre Araña. “Fue muy divertido”, dijo el actor a la AFP, porque “él mismo (el personaje) se da cuenta de que tiene una increíble oportunidad” al poder ponerse en la piel del Hombre Araña.

La película saca a flote temas clásicos de “Spider-Man”, en particular la dificultad de congeniar una vida normal con las obligaciones de un superhéroe, además de poner al arácnido homínido en confrontación con dos supervillanos: Electro (Jamie Foxx) y un amigo de infancia de Peter Parker, Harry Osborn (Dane DeHaan).

Un hombre corriente

El actor de 30 años, que tuvo una carrera más bien discreta antes de embarcarse en la franquicia de “Spider-Man”, asegura que su personaje es una especie de modelo para él.

“Quisiera conservar el espíritu del personaje y las lecciones que tomé de él para aplicarlas a mi vida”, afirmó. “Lo mejor a la hora de interpretar este papel es que pude pasar un tiempo con la energía de este héroe, este héroe corriente”.

“La gran lección (de la película) es que aunque seamos hombres corrientes, cosa que todos somos en cuanto seres humanos, todos tenemos la posibilidad y la capacidad para hacer cosas extraordinarias en nuestra vida”, añadió. “Esa es la principal lección que me dejó este personaje”.

Esta segunda parte también le dio a Andrew Garfield la oportunidad de explorar ciertos aspectos de su personaje que él sólo había sobrevolado en la primera parte, incluyendo su sentido del humor.

“Intentamos desarrollar este aspecto en la primera película, pero Peter pasa por demasiados desafíos personales para poder hacerse el gracioso. En cambio ahora puede realmente pasársela bien”, explicó.

Muy ocupado con “Spider-Man”, Andrew Garfield no tiene tiempo para dedicarse a otros proyectos. Apenas aparecerá este año en la película “99 Homes”, un film independiente producido por él. No obstante, no está negado a realizar cualquier tipo de cosas en el futuro, desde superproducciones a películas independientes.

“La verdad es que no juzgo las películas por su tamaño, sino sobre todo por lo que me dicen el corazón y las tripas”, comentó.

Como actor, afirma haber aprendido mucho al ponerse el traje del Hombre Araña, aunque no sabe exactamente qué cosa. “Lo sabré cuando termine esta aventura. Cuando uno está en el medio del viaje, es difícil ser objetivo”.

http://youtu.be/7Bxn57cnW2k