Con énfasis en la sobrecarga laboral del Ministerio Público, la autonomía del organismo y la alusión de los resguardos para los menores víctimas de delitos sexuales y los testigos protegidos, el fiscal nacional, Sabas Chahuán, entregó el balance de la gestión a la cabeza de la Fiscalía.

Es la séptima vez en que la máxima autoridad del organismo persecutor brinda la cuenta pública, que en esta oportunidad contó con la presencia de la presidenta de la República, Michelle Bachelet.

En su discurso, Chahuán destacó que la Fiscalía cuenta con múltiples mecanismos de control, haciendo frente de esta forma a las críticas por la autonomía del ente. “La autonomía [...] es una condición necesaria para que los ciudadanos tengan la garantía que quien dirige exclusivamente las investigaciones penales y tiene el poder de acusar ante la justicia, lo haga libre de presiones y sin responder a intereses ajenos a la búsqueda del bien común”, señaló.

En tanto, celebró la iniciativa legislativa ingresada en enero para proteger a los niños, niñas y adolescentes que hayan sido víctimas de delitos sexuales, aunque subrayó que este tipo de proyectos que ingresen al Congreso no debe interferir “con las facultades constitucionales de nuestra institución”.

Agregó que la revictimización es algo que se debe evitar en los procesos judiciales y urgen mecanismos para esto. “Si el Sistema de Justicia Criminal no es realmente capaz de dar garantías para que
ello sea efectivo, el Ministerio Público optará por no continuar con la acción penal”, sostuvo.

Las arremetidas contra la Fiscalía por los testigos protegidos también fueron aludidas en la intervención de Chahuán. Este martes, la Corte de Apelaciones de Concepción revocó la calidad de testigos secretos en el marco del Caso Tucapel Bajo, donde se investiga el incendio de una decena de casas en la capital regional del Bío Bío.

A lo anterior se suma la acción de la defensa de Emilio Berkhoff para permitir que se revelen las identidades de los 14 testigos que la Fiscalía mantenía como secretos.

“Entendemos el interés legítimo de la defensa del presunto delincuente por impedirlo, pero éste no puede estar por sobre la seguridad e integridad de quienes colaboran con los procesos judiciales”, afirmó el fiscal nacional.

Chahuán destacó también que el Ministerio Público se encuentra trabajando en un proyecto de fortalecimiento de la entidad que rescate lo más relevante de la iniciativa presentada el año pasado y que se mantiene congelada. El fin del proyecto es aliviar la carga de los fiscales, que en promedio deben tramitar anualmente 2.000 causas.

Chahuán recordó que en su oportunidad consideró insuficiente el proyecto de ley de fortalecimiento del Ministerio Público presentado por el Gobierno de Sebastián Piñera, y se manifestó optimista con la actual administración.

Asimismo, aseguró que desde el organismo se ha hecho “un esfuerzo extraordinario” por llevar adelante su funcionamiento. “Hemos enfrentado una evolución sostenida de la demanda penal sin mayor dotación ni recursos adicionales, en un contexto social cada vez más exigente y complejo”, afirmó.