El director de la Red de Universidades Públicas no Estatales G9, Aliro Bórquez, indicó que la educación es un derecho social y su gratuidad en el nivel superior debería ser una realidad, tanto en el sistema estatal como en el privado.
El debate sobre la gratuidad en la educación superior generó en los últimos días un quiebre al interior del Consejo de Rectores, quienes a través de un documento generado por la universidades estatales solicitaron al Gobierno que ésta comience en los planteles dependientes del Estado.
Posición contraria a la manifestada por las universidades tradicionales privadas, también llamadas públicas, agrupadas en el G9, quienes aseguraron que la liberación del pago debe depender de la situación social del alumno y no de la institución a la que asiste.
Su director y rector de la Universidad Católica de Temuco, Aliro Bórquez, argumentó que no hay pobres de primera o segunda categoría, sino que alumnos vulnerables, muchos de ellos justamente en la casa de estudios superiores que él encabeza, en una de las regiones más pobres del país.
Aliro Borquéz agregó que la gratuidad en la educación tiene que ser transversal, sin una distinción entre lo público y privado, tal como ha sido propuesto por el Gobierno en su reforma educacional.
