La presidenta surcoreana, Park Geun-hye, estimó este lunes que los actos del capitán y de la tripulación del ferry que se hundió la semana pasada con cientos de personas a bordo “equivalen a un homicidio”.

“Los actos del capitán y de ciertos miembros de la tripulación son totalmente incomprensibles, inaceptables y equivalen a un homicidio”, declaró la presidenta en una reunión con altos responsables políticos, según la casa presidencial.

“No sólo yo, todos los surcoreanos tenemos el corazón roto, bajo la conmoción, y henchido de cólera”, declaró la presidenta, que la semana pasada tuvo delante a familias de desaparecidos, estudiantes la mayoría, devoradas por el dolor y la indignación, en un tenso encuentro.

Las familias de los fallecidos (59 según el último balance) y desaparecidos (243) critican agriamente la reacción del Gobierno y autoridades después del naufragio, estiman sobre todo que los socorristas tardaron demasiado en introducirse en el ferry, enteramente sumergido.

Cada vez se hace más evidente que el capitán del barco, Lee Joon-seok, de 59 años y muchos de experiencia, retrasó demasiado la evacuación del ferry y luego abandonó a su suerte a los pasajeros cuando dejó el barco cuando cientos de personas seguían atrapados a bordo, añadió la presidenta.

“Esto supera completamente la imaginación, desde un punto de vista legal y moral”, declaró Park. La investigación examinará todas las partes implicadas, desde los inspectores encargados de la seguridad hasta la tripulación pasando por los dueños del ferry, precisó.

El capital del ferry y dos miembros de la tripulación del “Sewol” se encuentran detenidos.