Quienes perdieron sus viviendas en Iquique y Alto Hospicio siguen siendo catastrados, mientras ya se identificaron lugares para instalar mediaguas.

Tras el terremoto ocurrido en el Norte de Chile y la serie de réplicas, las autoridades informaron que existen más de 1.000 casas con daños graves y el Ministerio de Vivienda comprometió subsidios de arriendo e instalación de barrios de emergencia en sectores que ya se encuentran determinados.

La mayor preocupación de los damnificados es la poca claridad en la entrega de los plazos para la reconstrucción.

Los cientos de personas que aún duermen en carpas afuera de sus hogares están a la espera de anuncios en materia de vivienda que entregaría el delegado presidencial a cargo de la reconstrucción en Tarapacá, Julio Ruiz.