Ante el cierre de 6 zonas de producción y cultivo de mariscos bivalvos frente a Dalcahue en Chiloé -luego de detectar el brote de veneno amnésico-, pescadores artesanales y dirigentes del sector bentónico aseguran que esta situación ya había sido dada a conocer a Sernapesca y Salud regional hace por lo menos tres años y su información no fue considerada.

Marcos Salas, presidente del sindicato del Puerto de Quellón en la Isla Grande de Chiloé, y representante regional del bentónicos en Prodelmar, aseguró que el problema en el que se encuentra su sector tras el cierre de los centros de cultivos se arrastra desde el 2009, cuando denunciaron a las autoridades pertinentes la contaminación de las aguas de la zona por la acción de los barcos huelvos provenientes de la Región de Aysén, ya que sus productos no son efectivamente controlados. Responsabiliza y critica las acciones del Gobierno anterior y al sector salmonero al no considerar esta denuncia.

Salas asegura que el sector viene anunciando hace años que se ha dejado de controlar de manera eficiente las embarcaciones que provienen principalmente del sector Las Huaitecas y que desembarcan en Quellón con marea roja, asegura que es primordial generar recursos destinados a la investigación científica de lo que ocurre en las aguas que contienen las toxinas que provoca la denominada marea roja

Por su parte, Zoila Bustamante, presidenta de la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales, señaló que el cierre de laa faenas -determinación que adoptó la Seremi de Salud de Los Lagos el 8 de abril-, afecta profundamente al sector que representa sobre todo en vísperas de Semana Santa, compartiendo la opinión de Marcos Salas en cuanto a que es efectivamente, una situación que ya había sido informada a las autoridades pertinentes a través de distintas instancias.