El Comité No la CCU en Paine, integrado por organizaciones vecinales, de agricultores y de Agua Potable Rural de la zona, solicitó al presidente del directorio de la compañía, Andrónico Luksic, que retire la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto para instalar una planta de bebidas y cervezas en la comuna.

La iniciativa implica una inversión de US$300 millones y es resistida por los vecinos que alegan por el agua que se utilizará para las operaciones. Representantes del comité interpelaron al empresario el miércoles en el marco de la junta ordinaria de accionistas de CCU y este jueves dieron a conocer una declaración pública en la que afirman que “la única manera de poder generar un clima propicio para sentarse a conversar con la empresa CCU pasa necesariamente por el retiro inmediato de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) actualmente en tramitación dentro de la institucionalidad ambiental”.

“Si voluntariamente, el señor Luksic, ahora informado directamente por nosotros de la irregular tramitación del proyecto decide retirarlo consideraremos la posibilidad de reunirnos de manera oficial”, expresaron.

En su comparecencia ante los ejecutivos de la Compañía Cervecerías Unidas, los dirigentes del comité entregaron una carta en la que exponen su rechazo a la iniciativa, señalando, entre otros puntos que “debe tenerse en cuenta que, en el área donde se emplazaría el proyecto, existen 13 sistemas de Agua Potable Rural (“APR”), que abastecen a alrededor de 30.000 personas de las localidades rurales del sector, y que extraen sus aguas del acuífero de Paine”.

La planta, según su Declaración de Impacto Ambiental, se desarrollará por etapas y al final de ellas (año 2032) tendrá una capacidad para producir anualmente 3 millones de hectolitros de cervezas y 12 millones de hectolitros de bebidas, “utilizando 24 millones de litros de agua por jornada”, según reclaman desde el comité.

La organización anunció su “tajante rechazo a toda tentativa mitigadora de la empresa” y afirmó que en su conversación con Luksic “expresamos nuestras postura, los argumentos de carácter científico y jurídico que avalan nuestra posición además de enfatizar el hecho de que haber ingresado el proyecto como una simple Declaración de Impacto Ambiental (DIA) implica que el proyecto no afecta significativamente la vida y el territorio de Paine lo cual atenta contra la inteligencia de nuestra comunidad”.