La Superintendencia de Medio Ambiente suspendió el proceso administrativo sancionatorio en contra de la planta de tratamientos Hidronor Copiulemu.

Lo anterior, luego que la empresa presentara un plan de cumplimiento ambiental que debería evidenciar mejoras en sus procesos y disminuir los impactos que los vecinos han soportado desde hace varios meses.

Recordemos que el problema se inició hace un año cuando el derrumbe de una ladera produjo que residuos contaminados llegaran hasta el agua potable que consumen los sectores aledaños al vertedero ubicado en El Rabito, camino a Cabrero.

Los reclamos realizados por las personas afectadas desencadenaron un proceso sancionatorio por parte de la Superintendencia en contra de la compañía. Sin embargo, esto quedó en nada luego que la empresa propusiera a la autoridad una serie de medidas.

En relación a esto el seremi de Medio Ambiente, Richard Vargas, señaló que el sistema que trabaja en torno a este tipo de situaciones funciona efectivamente.

En el mismo sentido, la autoridad confirmó que será la misma Superintendencia la encargada de fiscalizar que se cumpla lo acordado y que si la empresa no cumple arriesga a recibir multas hasta dos veces mayores que la anterior.

La fuerza de la ciudadanía fue destacada por el encargado de la cartera medioambiental en la región del Bío Bío, quien hizo un llamado a ser responsables socialmente con el impacto que las empresas tienen en el entorno en que están insertas.

El procedimiento regular que las personas deben realizar cada vez que sientan que sus derechos sean vulnerados en esta materia es realizar una denuncia formal en el departamento de Medio Ambiente de su Municipalidad, en la Seremi o bien en la Superintendencia de Medio Ambiente.