En Villa Grimaldi se realizó el pasado domingo un acto en memoria de los tres jóvenes detenidos desaparecidos en 1976, en el marco de la Operación Cóndor.
Han pasado 38 años desde la última vez que se vio con vida a Juan Hernández, Luis Muñoz y Manuel Tamayo, los tres militantes socialistas que escaparon del país hacía Argentina porque eran buscados por la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) durante la dictadura.
Fue el 3 de abril de 1976 que estas personas fueron detenidas en Mendoza en el marco de la Operación Cóndor, que fue el denominativo de una coordinación de operaciones entre las cúpulas de los regímenes dictatoriales en Suramérica, para después ser llevados a Villa Grimaldi, antiguo centro de secuestro.
A raíz de lo anterior, se llevó a cabo el acto de conmemoración que contó con la presencia de la hermana de uno de los detenidos desaparecidos, Flor Hernández, quien manifestó que cerca de cumplirse cuatro décadas aún no hay justicia.
Al homenaje también asistió la madre Presidenta Michelle Bachelet, Ángela Jeria, quien fue galardonada por su labor en múltiples actividades y funciones ligadas a los derechos humanos.
Sin embargo, Jería opinó que el reconocimiento debería ser para todos quienes levantaron la voz durante la dictadura.
Al costado de Ángela Jeria se encontraba el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, quien afirmó que por mandato de la Presidenta Bachelet se creará la subsecretaría de Derechos Humanos.
Cabe consignar que en el caso de los tres jóvenes militantes detenidos desaparecidos, en Buenos Aires se está llevando a cabo un juicio oral a la Operación Cóndor en que han comparecido los imputados en el caso y los familiares de las víctimas.
