Una comisión de siete cancilleres de la Unasur volverán el domingo a Venezuela para apoyar el establecimiento de un diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición tras dos meses de protestas opositoras, dijo este sábado el canciller Elías Jaua.

“Al menos siete (cancilleres) han manifestado su intención de llegar desde el día de mañana (domingo)” para seguir oyendo “a los distintos sectores y apoyando y promoviendo que se dé definitivamente un diálogo entre la oposición venezolana, el presidente y nuestro gobierno”, indicó Jaua en un acto oficial.

A pedido del gobierno venezolano, la misión de cancilleres de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur) se reunirá entre lunes y martes en Caracas con varios sectores de la sociedad, luego de que el 24 y 25 de marzo pasados ya visitó la ciudad para facilitar el diálogo entre el gobierno y la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

La variopinta MUD, cuya ala radical ha promovido las protestas callejeras con el objetivo de lograr la renuncia de Maduro, se ha negado a atender el insistente llamado al diálogo del mandatario mientras continúe la represión en las protestas y se detengan a dirigentes opositores y estudiantes.

Jaua enfatizó que la comisión de la Unasur, conformada por 12 países de la región, no busca “mediar” en el diálogo, sino apoyarlo.

“Es necesario reiterar que no es mediación lo que está haciendo Unasur, es acompañamiento y apoyo a un proceso de diálogo convocado por el presidente (…) en el marco de la conferencia nacional por la paz” con varios sectores e iniciada a raíz de las protestas.

Tras la primera visita de la comisión, Maduro aceptó designar a un “testigo” internacional que facilite el diálogo con la oposición, entre los que desataca como candidato el cardenal secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, quien fue nuncio en Venezuela antes de asumir ese cargo.

Desde el 4 de febrero, Venezuela vive una ola de protestas contra la crisis económica y la inseguridad con saldo de 39 muertos, más de 600 lesionados y casi un centenar de casos abiertos por violaciones a los derechos humanos.