El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, fortalecido por su triunfo en los comicios municipales del domingo, relanzó el viernes su guerra contra las redes sociales y la justicia, confirmando sus ambiciones presidenciales.

Tras cinco días de silencio postelectoral, Erdogan regresó con sus diatribas ofensivas y provocadoras, criticando públicamente a la instancia judicial más alta del país, que le obligó a levantar su controvertida decisión de prohibir el acceso de 12 millones de usuarios turcos a la red Twitter.

“Debemos, por supuesto, aplicar el fallo de la Corte Constitucional pero no lo respeto. No respeto ese veredicto”, declaró Erdogan ante la prensa.

La Corte Constitucional consideró el miércoles ilegal la prohibición de Twitter ordenada hace dos semanas por el gobierno islamista conservador turco, al estimar que violaba el derecho a la libertad de expresión.

El gobierno se vio obligado el jueves a acatar la decisión, contra su voluntad.

En este mismo sentido, un tribunal de Ankara ordenó el viernes que se levante el bloqueo de YouTube, decretado la semana pasada por el gobierno turco tras la difusión del contenido de una reunión confidencial.

Pese a este fallo, sujeto a apelación, la plataforma de intercambio de videos permanecía inaccesible el viernes en Turquía.

Blanco de graves acusaciones de corrupción, el primer ministro turco declaró la guerra a las redes sociales ordenando el bloqueo sucesivo de Twitter el 20 de marzo y de YouTube el 27 de marzo para impedir la difusión de escuchas telefónicas comprometedoras.

Estas decisiones provocaron una avalancha de críticas, tanto en Turquía como en el extranjero, denunciando la deriva autoritaria del gobierno islamista conservador en el poder desde 2002.

Rumbo a las presidenciales

Gran vencedor de los comicios municipales del domingo pasado, Erdogan desestimó este viernes las voces críticas y lanzó nuevamente su batalla contra las redes sociales.

“Nuestros valores nacionales, morales, fueron ridiculizados. Los insultos contra un primer ministro y varios ministros eran (…) evidentes”, lamentó Erdogan.

Fortalecido por la victoria de su partido el domingo, Erdogan, quien dirige el país desde 2003, contempla presentarse a las elecciones presidenciales de agosto, que se disputan por primera vez por sufragio universal directo.

El primer ministro dio una nueva señal de sus intenciones el viernes, declarándose opuesto a todo cambio de la regla de su partido que lo obliga a abandonar sus funciones tras las elecciones legislativas de 2015.

“Estoy a favor de la regla de tres mandatos máximos”, dijo el viernes.

Sin embargo, Erdogan estimó que era “demasiado pronto” para anunciar una decisión y dijo que hablará primero con el actual presidente Abdulá Gül.