Otoño ha dejado sentir una sensación climática muy variada. En las mañanas y noches hace frío y en las tardes calor, que ocasionan cambios bruscos en la temperatura del cuerpo que provocan resfríos y otras patologías.

Patricia Fernández, médico broncopulmonar de la clínica Santa María, señaló en conversación con el programa Podría Ser Peor que “Sabemos todos que con los cambios de temperaturas los individuos más sensibles tienen más resfríos y enfermedades. Para prevenir es necesario evitar los cambios bruscos de temperatura, vacunarse contra la influenza, no salir mucho, pero usar calefacción eléctrica, ventilar las habitaciones de vez en cuando, y mantener la casa entre 18 y 23 grados”.

Según Fernández, el contagio por otras personas está dado por las secreciones y evitar el contacto directo con las manos, usar mascarilla y hablar a no menos de dos metros del enfermo.

“Los probióticos pueden ayudar a prevenir, pero lo mejor es conservar una temperatura adecuada y evitar lugares muy concurridos”, dijo la profesional.

Sobre la alimentación comentó que una persona que no esté desnutrida ni obesa son más inmunes a enfermarse, y se debe mantener una dieta equilibrada con frutas.

Finalmente, recomendó en invierno abrigarse por capas, para así cuando hace mucho calor sacarse la parte superior y si la sensación es de frío, poderse abrigar. Y usar bufanda para evitar el aire frío que entre directamente.

Escucha la entrevista completa a Patricia Fernández, realizada por Julio César Rodríguez en Podría Ser Peor: