En la línea más fina y crítica sobre los tiempos de respuesta y mecanismos de trabajo, la gran debilidad que mantiene la costa de Osorno y que queda nuevamente en manifiesto fue en materia de comunicaciones, donde la información se debate entre el alcalde de la comuna y el gobernador provincial.

Mientras estaba en terreno, el alcalde de San Juan de la Costa Bernardo Candia explicó que nuevamente queda en evidencia la falencia de las comunicaciones entre caletas, ya sea por sistema radial VHF, Satelital o telefónico.

Se espera que esta nueva experiencia, ponga de una vez por todas en el tapete, y a nivel de autoridades no solo locales sino que regionales, la necesidad urgente de buscar implementar alguna medida que permita a ciertos sectores salir del total aislamiento.

Consultado frente al simulacro de tsunami efectuado en 2013, Candia dijo que en dicha oportunidad también las autoridades y organizaciones participantes coincidieron en la falta de comunicación. Es más, conforme a lo informado, la misma Onemi habría levantado un proyecto para revertir la situación.

Una versión diametralmente opuesta fue la entregada por el actual Gobernador de la Provincia de Osorno, Gustavo Salvo quien aseguró a pie juntilla que siempre estuvieron comunicados con todo el borde costero de la nuestra zona y que el único punto que tardó un poco más fue Caleta Cóndor, echando por tierra de ésta manera las declaraciones del edil.

A dicha declaración se sumó la petición de no buscar errores en esta emergencia, dado que la comunidad solo debía enfocarse en lo bien que habían respondido los mismos y colaborado al minuto de la evacuación.

Por último, Salvo terminó diciendo que como medida instruiría el catastro de cada una de las familias que residan en el borde costero a fin de tener una idea detallada de éstas, dado que reconoció la existencia de comunidades al interior de la costa, donde no se tendría a ciencia cierta el dato de cuántas personas son.

Lo anterior considerando que como gobernador no tiene ningún antecedentes puntual sobre el detalles de los residentes de la costa, a pesar del ejercicio de simulacro realizado el año pasado -donde los organismos trabajaron de manera conjunta para levantar datos de qué familias debían ser evacuados y cuáles no-, como también cobre los puntos “ciegos” en materia de comunicación.