El Informe del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes, conocido como PISA, que cuantifica los niveles educativos a nivel internacional, ubicó a Chile en el puesto 36 entre 44 países.

Con esto, nuestro país encabeza las posiciones en Latinoamérica, no obstante queda muy por debajo de la media de los Estados miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

La prueba es considerada como objetiva al momento de medir los sistemas y programas de educación en los países de la OCDE. En la versión 2012, participaron 44 países. En aquel entonces, Singapur y Corea del Sur marcaron los máximos puntajes de esta prueba, con más de 560 puntos, seguidos de Japón, Alemania y Finlandia.

El experto en Educación, José Joaquín Brunner, indicó que es necesario poner los pies en la tierra y recordar que Chile es un país de mediano desarrollo.

El país con mayor puntaje de la región en el informe fue Chile, con 448 unidades, luego Brasil (428), Uruguay (403) y el último lugar en la zona lo ocupó Colombia, con 399 puntos.

El diputado demócrata cristiano Mario Venegas, presidente de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, sostuvo que la prueba nos sirve para demostrar que los estándares se encuentran bien planteados en la región, siendo Chile un país innovador en materia educativa.

El diputado Venegas también informó que temas como el proyecto de fin al lucro debiera estar zanjado de aquí al 21 de mayo.

La prueba PISA se rinde cada tres años y contempla niveles de medición con estándares de calidad de nivel mundial. Los países de la OCDE tienen la posibilidad de medirse con el fin de mejorar sus estándares y corroborar los niveles educacionales de cada nación.