La molestia está desatada en la Democracia Cristiana a nivel local en la provincia de Osorno. El haber recibido sólo dos seremías de las recientemente nombradas no gustó para nada en la interna de la colectividad falangista de la zona, por lo que el día de ayer se reunieron su principales dirigentes y militantes para analizar la situación y plantear públicamente su desacuerdo con lo que aseguran se trata de un mal trato al partido.

La gobernación provincial de Osorno sigue siendo una herida que sangra, sobre todo para el diputado Sergio Ojeda, quien reiteró el argumento de que la DC se merecía tal cargo, pues a su juicio, el contar con seis alcaldes en la zona les da pertinencia e identidad con su electorado, por lo que no dudó en enfatizar que como partidos están más que dolidos con la designación de cargos.

Pese a ello, el concejal Emeterio Carrillo, quien es el presidente en el distrito 55 de la DC, puso su mirada en el futuro, asegurando que hacer pública la molestia de la DC no tiene que ver con los cargos ya nombrados, sino para llamar a un mayor equilibrio político en la zona, lo debiera reflejarse en que militantes de sus filas sean considerados en los cargos aún faltantes por nombrar.

Pero el problema no sólo tiene que ver con la nominación de cargos desde el gobierno, sino también con el trabajo de la directiva nacional a la hora de pugnar por las ternas propuestas por las directivas comunales, provinciales y regionales.

Y es que en la interna de la DC no habría caído nada de bien el canjee que se habría realizado a favor de Claudio Orrego en la Intendencia Metropolitana, dejando de lado a las regiones de Arica y Parinacota, Antofagasta y Los Lagos en la negociación política.

Sin embargo, la molestia DC también va hacia el cómo se están tomando las determinaciones en el gobierno central, que es donde finalmente se están definiendo quiénes ocuparán los cargos de confianza, lugar en el que según el alcalde Puerto Octay, Carlos Mancilla tiene directa injerencia el Ministerio del Interior y la subsecretaría de la cartera, lideradas por Rodrigo Peñailillo y Mahmud Aleuy.

Por todo es que los ánimos no están para nada buenos en la interna local de la Democracia Cristiana, asegurando el alcalde de Purranque, Héctor Barría, que no se está cumpliendo el relato de la Nueva Mayoría de una democracia participativa.

Por todo es que enfatizaron en que si bien mantienen su lealtad a gobierno de Michelle Bachelet, al mismo tiempo hay que precisar que no significa ser incondicionales, por lo que reiteraron el llamado a que sean considerados en los cargos aún faltantes por nombrar, con el fin de dar un nuevo camino a una situación que calificaron como compleja, con un desequilibrio político que acusaron sólo afecta a la falange.