El mediador internacional en Siria, Lakhdar Brahimi, advirtió el jueves que la celebración de elecciones presidenciales en Siria podría hacer descarrilar las ya difíciles negociaciones de paz que intentan poner fin a tres años de conflicto.

“Si hay una elección, supongo que la oposición, toda la oposición, no estará probablemente interesada en discutir con el gobierno”, dijo Brahimi a la prensa luego de haber brindado un informe al Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York.

Ante el máximo órgano de decisión de la ONU, Brahimi advirtió que la reelección de Bashar al Asad en esas elecciones complicaría la búsqueda de una solución pacífica a la guerra civil que se ha extendido por tres años, según señalaron diplomáticos.

El mediador dijo “dudar de que la reelección del presidente Asad para un nuevo mandato de siete años pueda poner fin a los sufrimientos del pueblo sirio”, indicó un diplomático.

La elección está prevista para junio y Asad tiene la intención de postularse.

El conflicto en Siria ha dejado más de 140.000 muertos y millones de desplazados desde su inicio en marzo de 2011.

“Por el momento llamé la atención sobre esta situación y esta posibilidad. Son ellos los que deben ver si pueden hacer algo”, señaló Brahimi con tono más diplomático a la prensa.

Una segunda ronda de negociaciones en Ginebra entre el gobierno y la oposición sirios para buscar una solución pacífica al conflicto terminó en fracaso el pasado 15 de febrero.

Brahimi puso fin a las discusiones sin establecer una fecha para reanudarlas.

Este jueves, el mediador aseguró haber pedido ayuda al Consejo de Seguridad para reanudar esas negociaciones y tener “una tercera ronda que sea un poco más productiva que la segunda”.

“Queremos continuar el proceso de Ginebra”, subrayó, admitiendo estar “decepcionado por el resultado más bien modesto” del último encuentro en la ciudad suiza.

Ante la prensa, Brahimi no reiteró las críticas que lanzó contra el régimen sirio en su presentación en el Consejo de Seguridad.

Allí, según diplomáticos, acusó al gobierno sirio de “emplear maniobras dilatorias”.

El mediador dijo que por el contrario la oposición aceptó las bases de negociación de Ginebra, principalmente la creación de un gobierno de transición en Siria.

Brahimi indicó a los embajadores del Consejo de Seguridad que ambos bandos deben estar “mejor dispuestos” si quieren retomar las negociaciones, actualmente suspendidas.

La segunda ronda de negociaciones de Ginebra tropezó desde su inicio con el orden del día, ya que el gobierno sirio insistió en hablar de manera prioritaria del terrorismo y la oposición quería centrar la discusión en la creación de un órgano gubernamental de transición que privaría a Asad de todos o una parte de sus poderes.