La justicia de Ecuador suspendió temporalmente una multa de 138,5 millones de dólares que un órgano de control de mercado había impuesto a la empresa de telecomunicaciones Claro por afectar la libre competencia, informó el martes la firma del magnate mexicano Carlos Slim.

Un tribunal de lo Contencioso Administrativo del puerto de Guayaquil (suroeste) aceptó tramitar la demanda presentada por la empresa en contra de la resolución dictada en febrero por la Superintendencia de Control del Poder de Mercado, señaló Claro en un comunicado.

“Asimismo, la multa ahí establecida quedó suspendida al haber presentado Conecel (Consorcio Ecuatoriano de Telecomunicaciones) las garantías establecidas en la ley para ejercer su derecho” a impugnar la sanción a nivel judicial, agregó.

La multa fue aplicada porque Conecel, que forma parte del emporio América Móvil de Slim y opera la marca Claro, impide que la estatal Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) instale equipos en unos terrenos donde Claro tiene sus antenas.

“Claro no ha puesto barreras de entrada para que CNT pueda desplegar su red y, por lo tanto, no ha impedido la competencia ni restringido la misma”, había afirmado entonces Teodoro Maldonado, director jurídico de Conecel.

La sanción quedó suspendida temporalmente en virtud del proceso judicial en desarrollo, sin que haya un plazo establecido para que se defina.

La multa impuesta en primera instancia equivale a 10% del volumen de negocios de Claro en 2012.

Con 67% del mercado ecuatoriano, Claro es el principal proveedor del servicio de telefonía celular, por delante de Movistar (de la española Telefónica, con 30%) y de CNT (2,5%).

Conecel opera en Ecuador desde 1993 y en el año 2000 pasó a ser subsidiaria de América Móvil. En 2012 había sido condenada a pagar unos 193 millones de dólares por impuestos pendientes en Ecuador.