El próximo jueves 13 de marzo se lanza la campaña mundial para crear conciencia acerca de la detección temprana de la Endometriosis, que afecta a las mujeres cuando mensualmente su regla llega acompañada de intensos dolores que les impiden hacer su vida normal.

Dicha patología consiste en la implantación de tejido endometrial fuera del útero que genera un cuadro de inflamación pelviana.

En el mundo afecta entre el 7 y 10% de las mujeres en edad fértil, cifra que aumenta al 30% si es que además la paciente tiene infertilidad.

La enfermedad será abordada en el próximo Encuentro Internacional de Obstetricia y Ginecología de la Universidad Católica, que se realizará entre el 2 y 5 de abril en Viña del Mar.

Aunque en Chile no hay registros confiables, se estima que ha ido aumentando, de acuerdo a la estimación del doctor Guillermo Durruty, gineco-obstetra de la Red de Salud UC Christus.

“En la Universidad Católica tenemos la percepción que hay un aumento en los casos de endometriosis y particularmente las severas, atribuible entre otras cosas al retraso de la mujer en la maternidad y a la disminución de los hijos, ya que esta enfermedad se activa con las menstruaciones”, afirmó el especialista.

Explicó que hace un par de generaciones, “la mujer con sus primeras menstruaciones se embarazaba, luego tenía lactancia y después se volvía a embarazar. Por tanto, tenía pocas menstruaciones en su vida. Hoy, en cambio, las tiene en forma repetida, dado que en algunos casos las mujeres se embarazan entre los 30 y 40 años”.

Los especialistas explicaron que es una enfermedad que aparece fundamentalmente en la edad reproductiva de la mujer.

“Empieza a desarrollarse en ocasiones con las primeras menstruaciones y comienza a aliviarse con la llegada de la menopausia. El pick se produce alrededor de los 30 años, donde además se encuentran los casos más severos, con una evolución de larga data. En sus inicios es una enfermedad silenciosa porque cuesta diferenciar el dolor normal del dolor más grave”, sostuvo el doctor Guillermo Durruty.

“A la mujer desde joven le enseñan que los dolores son normales y por eso un pequeño dolor puede ser considerado aceptable. Sin embargo, cualquier cosa más allá de eso debe ser estudiado y vigilado, porque los cuadros más severos tienen años de evolución”, añadió.