El 31 de marzo finaliza el plazo para pagar el permiso de circulación, valores que se encuentran disponibles en el portal del Servicio de Impuestos Internos para que el usuario consulte la tasación fiscal tanto de los vehículos livianos como de los pesados.

En este marco, la cantidad de trabajo en las plantas de revisión técnica se ha intensificado, producto de la creciente demanda por parte de los dueños de vehículos que no mantienen actualizado el documento requerido para renovar el permiso.

De la misma forma, la posibilidad de resultar rechazado en esta instancia tras la evaluación es el foco de las preocupaciones de los usuarios que han postergado el trámite.

Ante este escenario, el director de Automotriz León, Nicolás Aguayo, junto con recomendar la verificación previa de los papeles que se piden antes de la revisión -entre éstos se encuentra el padrón, el certificado de revisión técnica, el permiso de circulación y el certificado de emisión de gases-, sugirió tener en cuenta algunos aspectos fundamentales si se quiere evitar un rechazo, que implica analizar previamente la situación del vehículo.

1.- Resulta esencial efectuar un análisis de gases y emisiones del motor. Un aumento considerable del consumo de gasolina, la humareda al encender el vehículo o acelerar el motor y la pérdida de potencia o dificultad para ganar velocidad pueden ser indicadores que apunten hacia el rechazo de la revisión técnica.

2.- Prestar atención a la alineación del vehículo. Si éste se desvía al soltar brevemente el volante mientras se encuentra en marcha o el manubrio no se encuentra centrado cuando el móvil está en reposo da pie para poner énfasis en este punto.

3.- Visualmente se puede detectar una falla en la suspensión cuando se encuentran manchas de aceite que escurren desde el cilindro de amortiguación. Las anomalías también pueden ser detectadas si el vehículo se balancea de un lado hacia otro.

4.- La fuerza que debe ejercer el conductor con el pedal de freno o el “largo” del freno de mano también sirve para advertir fallas si no se cuenta con un sensor que reporte el desgaste de pastillas y balatas.

5.- A simple vista, las anomalías en el sistema de luces se detectan si se advierte inestabilidad de la iluminación al transitar de noche (“cambios de luces”) o si el chofer debe forzar la vista en el trayecto. El buen funcionamiento de las luces de estacionamiento, intermitente, frenos, retroceso y el de la placa de la patente también son aspectos que son necesarios considerar.

6.- Los vidrios y el parabrisas deben encontrarse en perfectas condiciones y no contar con elementos que puedan obstaculizar la visión, como trizaduras o publicidad.

7.- Los cinturones y todos los elementos de seguridad que cuente el vehículo deben funcionar, encontrarse visibles y en el lugar correcto. Es algo que se debe tener en cuenta, por ejemplo, al instalar un cubrebutacas para proteger el tapiz.

8.- La revisión también considera el funcionamiento de las plumillas, la apertura y cierre de puertas y el estado en el que se encuentren las placas patentes del vehículo, por lo que el usuario tiene que estar atento para no ser rechazado.

9.- Verificar y eliminar posibles fugas de fluidos del motor. Para facilitar la observación, es recomendable lavar el motor por arriba y por abajo.

10.- Hay que estar atento a la profundidad de la huella de los neumáticos, ésta no puede ser inferior a los 2 milímetros. Tampoco deben estar gastados en los bordes.

11.- Las máquinas que se emplean para analizar los gases deben trabajar a una temperatura óptima. Por ello se recomienda evitar ser alguno de los tres primeros vehículos con los que se inicie la revisión por la mañana.

12.- En el caso del motor de vehículos catalíticos, también deben contar con una temperatura adecuada para ser evaluados. Para esto no se debe detener el motor mientras se espera ser atendido.