La Fundación Iguales informó que a contar de febrero pasado, la abogada Karen Atala se incorporó al directorio de la organización.

El grupo destacó el “fichaje” de Atala, considerando que se trata de la primera jueza chilena en declararse públicamente lesbiana al enfrentar un bullado caso de discriminación por orientación sexual que la llevó a demandar a Chile ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos tras perder la tuición de sus hijas.

Según informó en un comunicado la organización “en el marco de una profundización del discurso de Fundación Iguales en Derechos Humanos y en la búsqueda de una mayor diversidad y representatividad en sus equipos, se sumó recientemente a su directorio la jueza Karen Atala. Viene a complementar el equipo presidido por Luis Larraín y conformado por Pablo Simonetti, Alfredo Montaner y Sebastián Gray”.

“La participación de Atala en Iguales, hasta ahora, consistía en diversas asesorías y en ser miembro del Consejo Consultivo. Su figura es de gran relevancia para el activismo en Derechos Humanos y de la diversidad sexual, siendo quien ganó el primer caso de discriminación por orientación sexual que se conoce en organismos internacionales de la región. Karen Atala demandó al Estado de Chile ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, lográndose el 24 de febrero de 2012, la condena. En dicha sentencia se estableció como responsable al Estado de Chile de la violación del derecho a la igualdad y la no discriminación en razón de la orientación sexual, consagrado en la Convención Americana sobre Derechos Humanos”, explican.

Entre los logros de la abogada, la Fundación indica que “Karen Atala fundó junto a Emma de Ramón, ‘Las Otras Familias’, Asociación de Madres Lesbianas (2004 al 2008), siendo la primera organización chilena enfocada a las familias constituidas por lesbianas, donde se trabajó en visibilizar la realidad lésbica chilena y la precariedad jurídica en que viven. Junto con este trabajo, colaboró en redactar unos de los proyectos de Ley Antidiscriminación para ser presentado al Congreso chileno y ha colaborado con diversos colectivos y agrupaciones de Lesbianas Gay Bisexuales Transexuales e Intersexuales (LGBTI) del país”.

Para la jueza, su incorporación al Directorio de Iguales significa “un paso más en la lucha por la plena igualdad jurídica de las personas de la diversidad sexual y especialmente, de sus familias constituídas, las que hasta el momento están absolutamente marginadas del sistema jurídico chileno. Mi familia sufrió discriminación y espero que no se repita más a otras familias LGTBI chilenas”, dijo.