El gobierno prohibió organizar banquetes a los miembros del Parlamento chino, reunidos esta semana en su sesión anual, indicó el martes un alto funcionario, mientras las autoridades intentan mejorar su imagen tras varios escándalos de corrupción.

Los aproximadamente 3.000 delegados de la Asamblea Nacional Popular (ANP) también tienen prohibido de ahora en adelante hacerse regalos mutuamente, y se les advirtió que no debían incluir “manjares costosos” o vinos caros en el menú de sus comidas de trabajo, destacó Fu Ying, la portavoz de la ANP.

Fu Ying dio estas explicaciones en ocasión de una conferencia de prensa, previa a la inauguración, el miércoles, de la sesión anual de la ANP, una cámara sin poder real que se limita a aprobar las decisiones tomadas anteriormente en los círculos más elevados del Partido Comunista Chino.

Desde que el presidente Xi Jinping, que asumió el cargo hace un año, llamó a combatir la corrupción a todos los niveles, Pekín insta regularmente a sus cuadros a hacer gala de “austeridad”, condenando los gastos fastuosos y los banquetes extravagantes.

La actual campaña contra la corrupción será mencionada probablemente en el discurso de apertura de la sesión parlamentaria pronunciado por el primer ministro Li Keqiang.