El juicio del derrocado presidente egipcio Mohamed Mursi, acusado de incitación al asesinato de manifestantes, fue aplazado una vez más el martes, tras un pedido de recusación de los jueces presentado por la defensa.

Derrocado por el ejército en julio pasado, Mursi responde junto a otras 14 personas de la muerte de al menos siete manifestantes en unos enfrentamientos ocurridos en diciembre de 2012 delante del palacio presidencial.

Durante la audiencia del martes de este juicio que ha sido aplazado en varias oportunidades desde su inicio, el 4 de noviembre, un abogado de uno de los coacusados de Mursi pidió la recusación de dos de los tres jueces, explicando que uno de ellos había hablado del caso en una entrevista que se le había realizado.

El ex jefe de Estado islamista se enfrenta a un total de cuatro juicios, cuando su cofradía de los Hermanos Musulmanes, declarada “organización terrorista” por las nuevas autoridades, es el centro de una violenta represión.

Esta represión ha provocado más de 1.400 muertos desde julio de 2013, según la organización Amnistía Internacional.

Dos pedidos similares de recusación de jueces han sido presentados en dos más de estos juicios a Mursi, uno por “espionaje” y otro por haberse evadido de la cárcel durante la rebelión popular de 2011 que desembocó en la renuncia de Hosni Mubarak.

Un tribunal de apelaciones habrá de pronunciarse el 9 de abril sobre estos pedidos de recusación.