La Juventus de Turín y el seleccionador italiano, Cesare Prandelli, se enzarzaron en las últimas horas en una disputa a propósito de la convocatoria para el amistoso del miércoles contra España del defensa Giorgio Chiellini, recién recuperado de una lesión.

“Cuando veo a un jugador en la cancha o en el banquillo, tengo el derecho, repito, derecho (di-rit-to en italino, Prandelli ha enfatizado cada sílaba) de convocarlo”, declaró el técnico en la conferencia de prensa antes del viaje a Madrid.

Prandelli respondió así a los ataques de la Juventus, club del jugador, que criticó su convocatoria con Italia sin que Prandelli advirtiese al equipo turinés.

“Encuentro que el comportamiento de Prandelli es poco cortés y falto de educación”, criticó el entrenador de la Juve Antonio Conte, quien subrayó que “Chiellini no ha jugado desde hace tres semanas”.

El director deportivo de la Juventus, Beppe Marotta, declaró por su parte que le hubiese gustado haber recibido una llamada del seleccionador.

“Pero yo lo que esperaba es que me llamasen ellos”, respondió Prandelli. “Si Marotta tiene un problema, debe llamarme. Su médico me dijo que todos sus jugadores estaban en forma y aptos (para ser convocados), incluido Chiellini”.

Prandelli también se refirió a la ausencia del centrocampista de la Roma Daniele de Rossi, autor de un puñetazo sobre Mauro Icardi, del Inter, el pasado sábado.

“Tenemos un código ético (…) En el Mundial no quiero que nos quedemos con 10 (jugadores). Sobre algunos gestos irreflexivos, el juez soy yo”, zanjó el técnico.