Una humedad del 90%, vientos de hasta 40 kilómetros y bastante frío han soportado tres mujeres que desde el miércoles pasado mantienen una huelga de hambre.

Estas mujeres que fueron desvinculadas de la empresa contratista Aramark, que realiza trabajos en la división Chuquicamata, permanecen a un costado de la Catedral de Calama, durmiendo en la vía pública.

Ellas acusan que nadie les ha dado apoyo para solucionar este conflicto, donde una de ellas debe movilizarse con bastones debido a un accidente laboral que sufrió en dicha empresa.

Asimismo advirtieron que si el martes no tienen respuesta empezarán una huelga de hambre seca.