El Producto Interior Bruto (PIB) de España progresó 0,2% en el cuarto trimestre de 2013, confirmando una tímida salida de la recesión, pero en todo el año se contrajo 1,2% en un país minado por un desempleo récord, según las cifras oficiales definitivas publicadas el jueves.

Estas cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) confirman una pequeña aceleración de la recuperación en el último trimestre, ligeramente inferior sin embargo a las previsiones y demasiado débil para permitir la creación de empleos en un país que tiene un desempleo del 26%.

Con un crecimiento del 0,2% en el último trimestre (el INE preveía un 0,3%), el PIB se mantiene en una caída del 1,2% en el conjunto del año, pero confirma la salida del país de su segunda recesión en cinco años, que se inició en el tercer trimestre con un subida del 0,1% del PIB.

El gobierno de derechas, que desde hace dos años lleva a cabo una política de austeridad sin precedentes para sanear las cuentas públicas, espera mantener esta recuperación y prevé ahora un crecimiento del 1% para 2014 cuando hasta ahora lo situaba en el 0,7%.

“La previsión es que alcancemos un crecimiento del 1% para 2014 y 1,5% para 2015″, afirmó el martes el jefe del gobierno, Mariano Rajoy.

Esta mejora debería, según él, traducirse en 2014 en “creación neta de empleo”, que será “a un ritmo todavía moderado en este año, sí, pero que se acentuará de forma más intensa en 2015″.

Advirtió, no obstante, contra cualquier “triunfalismo” cuando el desempleo sigue manteniéndose en un nivel récord del 26,03% de la población activa.

La débil demanda interior sigue siendo el principal freno para una recuperación más firme, incluso aunque haya registrado “una variación anual menos negativa en el cuarto trimestre de 2013″, subraya el INE.

La demanda exterior se mantiene positiva en el cuarto trimestre, pero a un menor grado, añadió el INE.

No obstante, el dinamismo de las exportaciones, que han ayudado a amortiguar el impacto de la crisis plasmada en el menor gasto de los españoles, siguen siendo esencial para consolidar la vuelta al crecimiento.

Con una subida del 5,2% hasta los 234.240 millones de euros, las exportaciones alcanzaron en 2013 un nuevo pico histórico, a pesar de que esta alza se haya ralentizado a finales de año.

En cambio, en diciembre, las importaciones crecieron un 5,6% respecto a diciembre de 2012 hasta los 20.140 millones de euros, señal de que empieza a haber cierto movimiento en el consumo de los hogares.

Esto “apuntaría hacia una recuperación de la demanda interna y el inicio de la fase de crecimiento”, sobre todo si tiene en cuenta el alza en las importaciones de bienes de equipo, que subieron un 19,7%, afirmó el ministerio de Economía al publicar estas cifras el 21 de febrero.